Para realizar la división de los alumnos en
los distintos grupos, no solo hay que tener en cuenta el nivel de patinaje de
cada alumno, sino también la edad.
La importancia de la edad se debe a que los
niños, según van creciendo, pasan por diferentes etapas en su desarrollo. Estas
etapas determinan la manera en la que el alumno ve su mundo exterior y cómo
interacciona con él.
Teniendo en cuenta que vamos a utilizar el
juego como nuestra mayor herramienta de aprendizaje, hay que conocer las
diferentes etapas por las que pasa el alumno, para así poder adaptar nuestra
metodología su nivel. Por lo tanto, si la división de los alumnos no concuerda
con las diferentes etapas del desarrollo, será mucho más complicado realizar una
clase adaptada a todos, donde cada uno de ellos, sea capaz de realizar las
actividades planteadas sin resultar frustrantes o aburridas.
Las etapas del juego son las siguientes:
- Juego sensoriomotor (0-2 años): esta etapa no nos influye mucho debido a que los niños no están capacitados para la utilización de los patines.
- Juego simbólico (2-6 años): A partir de los 2 años, podemos comenzar con el aprendizaje del patinaje a través de juegos muy creativos, dramáticos y con pocas reglas, donde los alumnos puedan dar rienda suelta a su imaginación, y al mismo tiempo aprender técnicas del patinaje. Utilizaremos materiales que nos sirvan de apoyo como por ejemplo las cuerdas, que podrán ser serpientes, colas de ratón o cualquier cosa que nos imaginemos. También es importante empezar a trabajar en parejas y en pequeños grupos (evitando que sean siempre los mismos) para así, poco a poco, introducirlos en el mundo social y que vallan aprendiendo a trabajar en equipo.
- Juego de reglas (6-9 años): A partir de los 6 años aproximadamente, los niños comienzan a comprender las reglas del juego, por lo que podremos introducir juegos con bastantes reglas y adaptaciones de deportes como por ejemplo el baloncesto. Hay que tener en cuenta que no solo debemos trabajar partiendo de los juegos competitivos, sino también trabajar los juegos colaborativos que ofrecen las mismas oportunidades en cuanto al aprendizaje de técnicas del patinaje, y al mismo tiempo inculca en los alumnos valores muy importantes.
A pesar de todo lo dicho anteriormente, hay
que ser un poco flexibles en cuanto a la distinción de niveles, teniendo en
cuenta que el cambio siempre tiene que beneficiar al grupo y a la adquisición
de conocimientos.
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